Biblioteca - Kangyur - Paritta
candra-sūtra
Sutra de la Luna-Chandra
Con fe, ¡alabo las Tres Nobles Joyas!
Esto es lo que oí una vez.
El Bendito estaba morando en el jardín de Anathapindada en la arboleda de Jetavana en Shravasti. Entonces, en ese momento, Chandra-luna, el hijo del dios, fue apresado por Rahula, el señor de los asuras. Entonces Chandra-luna, el hijo del dios, recordó al Bendito y rezó las siguientes estrofas:
¡Me inclino ante el Iluminado, el héroe!
[¡Tú] eres rápido para liberar a todos!
Así que acudo a ti en busca de protección,
pues he caído en estas fauces.
Entonces el Bendito, por el bien de Chandra-luna, el hijo de un dios, dijo las siguientes estrofas a Rahula, el señor de los asuras:
Puesto que el Iluminado ama al universo,
Chandra se ha puesto bajo la protección del arhat, ¡el Tathagata!
¡Por lo tanto, deja ir a Chandra la luna, Rahula!
Entonces Rahula, el señor de los asuras, liberó a Chandra-luna, el hijo de un dios. Cuando lo hubo hecho y todo estaba como antes, el señor de los asuras, Bimmlachihra, se acercó a él. Cuando se acercó, su mente se volvió infeliz y sus cabellos se erizaron de pena. Se paró frente a él.
Y de pie ante él, el señor de los asuras, Bimmlachihra, el señor de los asuras, dijo las siguientes estrofas a Rahula, el señor de los asuras:
¿Por qué estabas asustado?
Has dejado ir a Rahula Chandra-luna, cuyo
¡apariencia corporal es mala en todas partes!
¿Por qué temiendo, has llegado a eso?
Rahula dijo:
Si al escuchar los versos del Iluminado,
no hubiera liberado a Chandra-luna,
mi cabeza se habría roto en siete pedazos,
¡no habría felicidad en la vida!
Así concluye el sutra Chandra-luna.
En presencia del gran sabio Anandashri, intérprete que ha oído muchas cosas, el bikshu Shakya Nyima Gyaltshen Palzangpo tradujo y corrigió lo dicho en dos idiomas en el gran templo de Palttharpa Ling.
Que el Sol y la Luna estén respectivamente sobre la tierra.